Científicos de la Universidad Estatal de Georgia (Estados Unidos) han desarrollado un sencillo y rápido análisis de sangre para la colitis ulcerosa mediante una espectrometría infrarroja que podría reducir el uso de colonoscopias a la hora de detectar esta enfermedad inflamatoria intestinal.
El hallazgo ha sido posible gracias al trabajo conjunto del Departamento de Física y Astronomía y el Instituto de Ciencias Biomédicas de la universidad, que utilizaron una espectrometría infrarroja con transformada de Fourier (ATR-FTIR) mediante reflectancia total atenuada para analizar el suero sanguíneo de ratones con colitis.
De este modo, según cuentan en un artículo en la revista ‘Journal of Biophotonics’, encontraron hasta nueve picos de absorción en la muestra de sangre que podrían utilizarse para predecir la presencia de la enfermedad.
Las colonoscopias permiten analizar el revestimiento interno del intestino grueso (recto y colon) y a partir de los 50 años se realizan más a menudo para detectar precozmente posibles anomalías, desde úlceras, pólipos e incluso tumores.
Sin embargo, a muchas personas no les gusta someterse a esta prueba porque resulta molesta y requiere una preparación previa, con dieta blanda, ayuno y el uso de una solución para limpiar el colon. Además, también resultan costosas porque requieren sedación y, aunque raras veces, pueden presentar complicaciones.
Pese a todo, actualmente son una herramienta más que fiable y necesaria para el diagnóstico y seguimiento de las enfermedades inflamatorias intestinales, han apuntado Unil Perera y Didier Merlin, autores del estudio. «No estamos hablando de reemplazar la colonoscopia. Hemos demostrado que una prueba de sangre mínimamente invasiva puede decir si un paciente puede tener colitis. Y entonces habrá que hacer una colonoscopia para ver hasta qué punto la enfermedad se ha diseminado y si puede haber signos de cáncer», ha precisado Perera.
PROBARON EN DIFERENTES TIPOS DE COLITIS
En este estudio, los investigadores utilizaron dos grupos de ratones con diferentes tipos de colitis, crónica y aguda. En los ratones con colitis crónica, la interleuquina 10 (IL 10) tuvo una modificación génica que les permitió desarrollar colitis. Y a los ratones con colitis aguda se les administró dextrán sulfato de sodio (DSS) en su agua durante siete días y la acabaron desarrollando.
Los investigadores obtuvieron muestras de sangre y fecal de los roedores de ambos grupos, así como de otros ratones sin la enfermedad que formaban parte del grupo control, y sometieron el suero a la espectometría para enviar luz infrarroja a las muestras en un amplio rango para encontrar los picos de absorción.
A continuación, compararon las muestras de sangre con las del grupo control y encontraron diferencias en nueve lugares distintos. El objetivo es obtener nuevas muestras porque quizá no necesiten encontrar los nueve picos de absorción observados para identificar a un ratón con colitis, han apuntado.
«Además, el uso de la espectometría podría identificar marcadores que permitan predecir específicamente el desarrollo de colitis, lo que también afectará de forma positiva al manejo de fármacos», según Merlin, que también confía en poder obtener marcadores que permitan distinguir entre la colitis y la enfermedad de Crohn, otra patología inflamatoria intestinal.
Fuente: Infosalus