No son pocas las personas que deciden eliminar el gluten y la lactosa de su dieta, debido a la fama de nutrientes poco saludables que ambos han ido adquiriendo.
Estas exclusiones no tendrían justificación científica. Prescinden de esos alimentos por decisión propia, sin consultar con el médico, o bien por asesoramiento de sus familiares o conocidos.
En general, la preocupación por eliminar de la dieta los alimentos considerados como menos beneficiosos para la salud afecta mayoritariamente a las mujeres.
Desde SHC Medical hacemos hincapié en que, ante cualquier duda de que un alimento nos pueda estar sentando mal, se debe acudir al médico, que realizará tanto una valoración clínica como las pruebas complementarias necesarias para establecer el diagnóstico adecuado y, en caso de precisar, un tratamiento dietético individualizado.
“Dejar de comer estos alimentos, sin supervisión médica, puede favorecer que se desarrolle una intolerancia más fuerte”, asegura el Dr. Cáceres, en cuya opinión, no debe realizarse la eliminación de nutrientes o dietas de exclusión tales como dieta sin gluten o sin lactosa, basados en un autodiagnóstico y sin el correcto asesoramiento y seguimiento».