La Fibromialgia es una enfermedad crónica que cursa con brotes, es decir, alterna períodos de mejoría y alivio, con otros de empeoramiento de la salud. Un brote, también llamado crisis o recaída, es la aparición brusca de un episodio temporal de reagudización de la intensidad de los síntomas de la enfermedad, con una duración e intensidad distinta en cada paciente.
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¿Cuántos tipos de brotes hay?
El más habitual se caracteriza por un aumento del dolor generalizado, la rigidez, las alteraciones del sueño y la incapacidad funcional (despistes, olvidos, falta de concentración), dificultad para realizar las actividades del día a día, por lo que el paciente se ve obligado a reducir su actividad diaria e incluso detenerla por completo durante algunos días, generalmente suele aparecer después de situaciones de sobrecarga física o emocional.
Otros brotes coinciden con periodos estacionales (invierno o verano) o en situaciones de cambio brusco de tiempo, temperatura, humedad.
En algunas mujeres, los brotes se dan en algunas de las fases del ciclo menstrual, debido a trastornos hormonales. En estos casos, las pacientes suelen presentar, con frecuencia, trastornos del ánimo con depresión o ansiedad.
Básicamente, los brotes de reagudización están relacionados con factores desencadenantes como esfuerzos físicos, situaciones de estrés y cambios estacionales que van empeorando la calidad de vida de los pacientes.
¿Cómo empieza un brote de fibromialgia y cómo hay que actuar?
Las señales de advertencia que el cuerpo envía de que estás empezando un brote son: sentirse especialmente débil, mareado, cansado o confuso, tener dolor muscular u otros síntomas más intensos que de costumbre, estar más sensibles a los cambios externos e incluso tener problemas para pensar y/o recordar.
En el momento en que se empieza a notar que viene un brote, se debe bajar la carga e intentar reducir el contacto con estímulos desencadenantes, como ruido, olores, sitios de gran afluencia de gente, estrés laboral y/o familiar, etc. Nuestra recomendación es que, ante la aparición de la crisis, acudir al médico especialista para ajustar el tratamiento y así intentar evitar que el brote sea muy fuerte o que las consecuencias de este no empeoren la calidad de vida del paciente.
¿Quién es más propenso a tenerlo?
La fibromialgia es más frecuente en mujeres, cada vez se reduce más la edad de los pacientes, hace 10 años la edad los pacientes más jóvenes diagnosticados de fibromialgia tenían una media de edad de 30 -35 años, actualmente esta edad media ha bajado a 21-25 años.
¿Qué tratamientos se pueden aplicar en estos casos?
En algunos casos es conveniente valorar si es necesario ajustar el tratamiento de base, atendiendo a la crisis. Desde nuestra experiencia, el tratamiento más potente para recuperar la crisis es el LIMS (estimulación magnética transcraneal de baja intensidad) junto con sueroterapia, crioterapia, GEMS (grounding-earthing magnetic stimulation), etc. Como en cada paciente las crisis son distintas e incluso en un mismo paciente una crisis en verano puede ser completamente distinta a una crisis en inverno, es importante no ceñirse a un único tratamiento, sino valorar cual es el más indicado en cada momento.
¿Hay alguna manera de prevenirlos?
Los brotes de fibromialgia en algunos casos son impredecibles, pero aun así es indispensable que los pacientes mantengan una alimentación sana (ajustada a sus necesidades), una buena higiene del sueño, así como el manejo del estrés y la práctica de ejercicio físico igualmente ajustado a sus necesidades diarias, ya que un día podrá hacer una rutina de ejercicio y al otro día puede que necesite descansar. Respetar esas necesidades del cuerpo son clave para el manejo de los síntomas.
¿Cómo de peligroso es un brote de fibromialgia?
El riesgo que tienen los brotes son las secuelas que van dejando, que dificultan la recuperación del paciente. Tras un brote, es importante volver gradualmente a un nivel normal de actividades, ya que querer hacer de golpe todo lo que no has podido durante el brote, hace que tu cuerpo no esté preparado y puede llevar a otra recaída.
¿Cuántos brotes al año puede sufrir un paciente con fibromialgia?
Depende mucho de cada paciente y es difícil establecer un patrón. Los síntomas pueden variar enormemente a lo largo del día, con los cambios de tiempo o por épocas.
¿Cómo puede ayudarte SHC Medical?
El abordaje que hacemos de la Fibromialgia en SHC Medical es muy amplio, abarcamos el eje inmunoneuroendocrino, mitocondrial y emocional, por lo que el tratamiento es completamente individualizado, manejamos dietas terapéuticas de desensibilización celular, sueros intravenosos, crioterapia, LIMS, GEMS, oxigenoterapia, entre muchos otros, con el fin de regular la disfunción inmunoneuroendocrina mitocondrial y emocional que el paciente presenta. Haciendo este abordaje tenemos un porcentaje de mejora en más del 90% de los pacientes.