Los científicos han encontrado diferencias en las bacterias intestinales de las personas con Síndrome de Fatiga Crónica (SFC), en comparación con sus pares sanos. El hallazgo está entre los primeros en vincular anomalías en la conformación de las bacterias intestinales y la fatiga crónica, pero no está claro si esas diferencias son una señal del síndrome o una causa subyacente.
Los investigadores seleccionaron a 50 pacientes con Síndrome de Fatiga Crónica y a 50 sujetos sanos de cuatro ciudades estadounidenses, pareados por edad, sexo, etnia, lugar geográfico y estación del año en que se extrajeron las muestras. Un 82% del total eran mujeres, con una edad media de 51 años. Se analizaron genéticamente muestras fecales de todos los participantes para identificar los tipos y cantidades de bacterias que contenían, y también se analizaron muestras de sangre.
Se encontró que las personas con Síndrome de Fatiga Crónica tenían bacterias distintas y cantidades elevadas de varias especies de bacterias en los intestinos en comparación con los individuos sanos. Además, la composición bacteriana parecía cambiar dependiendo de la gravedad de la enfermedad. Estas asociaciones se mantuvieron independientemente de si una persona con Síndrome de Fatiga Crónica padecía también el Síndrome del Intestino Irritable.
Publicado en la revista Microbiome bajo el título: Fecal metagenomic profiles in subgroups of patients with myalgic encephalomyelitis/chronic fatigue syndrome. Nagy-Szakal D, Williams BL, Mishra N, Che X, Lee B, Bateman L, et al.
Fuente: Revista de Neurología