Esta técnica va dirigida a pacientes diagnosticados de migraña, cefaleas tensionales, lumbalgias, obesidad e hinchazón generalizada, entre otras enfermedades relacionadas con el sistema inmunomeuroendocrino.

Consiste en generar aplicaciones de magnetoterapia pulsante de baja frecuencia que van dirigidas a puntos específicos según la patología del paciente. Este tipo de tratamiento maneja parámetros del campo electromagnético de baja frecuencia e intensidad.

A este tipo de tratamiento se le atribuyen efectos regenerativos, disminución del dolor punzante, mejora de la circulación sanguínea, disminución en la inflamación y la hinchazón, entre otros.

El tratamiento tiene una duración de 6 semanas con aplicaciones semanales, aunque esto puede variar según la sintomatología de cada paciente. Con este tipo de técnica se obtienen resultados positivos, disminuyendo la intensidad del dolor específico, logrando reducir la inflamación, así como el uso de fármacos.